Tras cuatro meses de gestión, múltiples alcaldes de Lima vienen siendo amenazados de muerte, luego de poner orden en sus localidades contra las mafias y la delincuencia. Ahora, usan chalecos antibalas y contratan seguridad privada.
Rodolfo Adrianzén, alcalde de La Perla, es amenazado por personas que le piden que reponga a trabajadores en el municipio que encabeza. Su familia está aterrada luego que este dictara la orden de despedir a extrabajadores involucrados al sicariato y cobro de cupos de obras.
Otro amenazado con videos y fotos de armas es Hernán Sifuentes, burgomaestre de San Martín de Porres, quien pretende ponerle fin a las mafias enquistadas en su jurisdicción.
Desde Comas, Ulises Villegas, asegura que las amenazas le llegan por parte de delincuentes extranjeros que lotizan las calles para alquilarlas al comercio ambulatorio y ahora es víctima al igual que su familia.La autoridad edil de Chorrillos, Fernando Velasco, y Rennán Espinoza, de Puente Piedra, también se encuentran en la lista bajo amenazas.
Todos ellos exigen al Gobierno que tome cartas en el asunto, más presencia policial, garantías para sus vidas y de sus familias y que declaren en emergencia sus localidades.
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